La pandemia de COVID-19 ha supuesto una interrupción tan grande en nuestras vidas que hablamos de la “nueva normalidad” cuando la pandemia esté controlada. Hasta entonces todo es incertidumbre: el estado de salud de buena parte de la población, el impacto en la vida de nuestros menores y nuestros mayores, el futuro económico de nuestra sociedad, etc.
Un ámbito especialmente delicado es la educación. Las puertas de los centros educativos se encuentran cerradas desde el 14 de marzo y en ese tiempo los docentes, las familias y los estudiantes han levantado una escuela a distancia con sede en los hogares del profesorado y el alumnado. Ha sido un esfuerzo realmente impresionante por parte de todos aunque con el paso de la escuela presencial a la escuela a distancia se han visto también los problemas de nuestro sistema educativo al menos en tres ámbitos: la escuela inclusiva, la escuela de competencias y la escuela digital.
De todas las cuestiones que ahora mismo se debaten en educación, hay un asunto especialmente sensible: la evaluación final del alumnado en este curso 2019-2020. La incidencia en el presente y el futuro del alumnado hace que la resolución que demos a este problema sea tan relevante como delicada pues el derecho a la educación y el principio de equidad deben presidir en todo momento las decisiones que se tomen.
En todo caso, si se quiere abordar seriamente este problema es especialmente importante conocer cuál es la opinión del profesorado respecto a la evaluación de este atípico curso 19-20. El profesorado, que ha demostrado sobradamente su profesionalidad y su entrega en la transición de la enseñanza presencial hacia la enseñanza a distancia, es el principal agente responsable de la evaluación en los centros y conocer cuál es su postura ante la evaluación final del curso es fundamental si se busca honestamente una solución al problema generado por la pandemia.
Por esta razón, nuestros compañeros de Conecta13 y el grupo de investigación HUM-840 “Conocimiento Abierto para la Acción Social”, Fernando Trujillo y Adrián Segura, han desarrollado junto a Manuel Fernández (Universidad de Málaga) y Manuel Jiménez (UNIR) una investigación para conocer cómo se posicionan los docentes en nuestro país respecto a distintos escenarios de evaluación posibles. La investigación muestra un panorama complejo que distingue entre etapas y también entre diferentes maneras de entender la enseñanza, la evaluación y la justicia en el ámbito de la educación.
Si quieres conocer los resultados de la investigación, el #SantillanaLab ha colaborado desinteresadamente con la investigación publicando los resultados en un informe.
Así mismo, el próximo 6 de mayo nuestro compañero Fernando Trujillo presentará los resultados de esta investigación y hablará sobre Evaluación y equidad desde el confinamiento dentro de los #SantillanaLabTalks.
Esperamos que encuentres tanto el informe como la presentación interesantes y que entre todos encontremos salidas para esta encrucijada que estamos viviendo.
¡Salud para todos!